
Hace ya pocos días, mi padre... De este mundo se marcho
Espontaneo e imprevisto el momento llego.
El más intenso dolor, fue lo silencioso de su partida;
El golpe del saber que había fallecido.
Fue tan rápido, que a veces pienso que no ha sucedido.
Cuando avisaron tu muerte,
No supe que decir. Me mantuve callado.
Pero dentro de mí, gritaba por este acontecer tan triste.
Desde entonces... Solo recuerdo todo lo que has hecho por tu esposa, por mí y mis hermanos.
Tolerando año tras año nuestro carácter.
Siendo siempre un padre ejemplar.
Siendo siempre un padre ejemplar.
Ya que aun después de tu partida, seguimos tu ejemplo
De un padre perfecto.
Demostrando que aun vives nosotros.
Demostrando que somos fuertes.
Demostrando que entre nosotros vive este hombre orgulloso.
Tus familiares y dolientes, en tu funeral se despidieron.
Sé que los escuchaste, y lograste ver...
El dolor inmenso de tu ausencia en este mundo.
Al dejar con tu adiós palabras sin poder expresar, que yacen en lo profundo de cada uno.
Hasta tu hijo mayor, siendo el más fuerte, lloro y se lamento como todos nosotros.
Papa...
Ahora te encuentras en aquel lugar, donde todos deseamos estar.
De donde nos proteges y oras por nosotros para gozar de ese beneficio.
De ir a ese espacio tan grande que es el paraíso...
Padre, tu imagen quedo reflejada en mi alma
Y en la de todos aquellos que te aman.
Hablo por toda tu familia
Al decir: "Siempre recordaremos cuando este héroe llegaba del trabajo
O a nuestros cumpleaños, alegrando nuestros días, produciendo solo risas.
Oye papa! Esto no es una despedida... Te veré pronto.
Sé que algún día podre abrazarte, de nuevo.
Y brindaremos junto a todos aquellos, nuestro reencuentro.
Campanear nuestras copas y gozar de beber un buen vino, o en tu caso podría ser un buen whisky...
Te extrañamos.
Sé que siempre estarás a mi lado.
Nunca sentiré que mi alma esta sola...
Solo me queda decir: Te amo papa, gracias por todo...
